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Los Estados no están solos en su compromiso con los derechos humanos

Un hito seminario sobre Mecanismos Nacionales de Aplicación, Presentación de Informes y Seguimiento (MNIRF) en el ámbito de los derechos humanos (celebrado de conformidad con la resolución 51/33, adoptada por el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en 2022), fue organizado por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), con el apoyo de Paraguay, Brasil y otros Estados y expertos.

El Geneva Cities Hub (GCH) hizo un llamamiento para una mayor participación de los gobiernos locales y regionales (GLR) en estos mecanismos nacionales que se han desarrollado significativamente a lo largo de los años en varios Estados, lo que coincide con una mayor coordinación e implementación estatal en el ámbito de los derechos humanos y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

El creciente número de NMIRF en todo el mundo significa el compromiso de los Estados con el cumplimiento de sus obligaciones, principalmente las derivadas del EPU, pero también de otros mecanismos de derechos humanos de la ONU. Los Estados no son los únicos que se comprometen con los derechos humanos. Los GLR se hacen eco de este compromiso y, en ocasiones, defienden prácticas más progresistas que sus homólogos estatales. Sin embargo, para maximizar su eficacia, los GLR necesitan el diálogo, el intercambio y, a menudo, la financiación de su gobierno central.

Para garantizar una actuación eficaz del Estado en la aplicación de los derechos humanos en ámbitos como la vivienda, la contaminación atmosférica, la movilidad, la inclusión social, la educación, la sanidad e incluso la contaminación por plásticos -una amenaza que, según algunos, es aún más inmediata para la vida en la Tierra que el cambio climático-, es necesario que se comprometan plenamente con las autoridades locales. Así pues, la incorporación de los GLR al marco del NMIRF es un paso estratégico. La participación de todos los niveles de gobierno de un país determinado es una situación en la que tanto los Estados como los GLR salen ganando en lo que respecta a la aplicación de los derechos humanos.

El GCH cree que los Estados se beneficiarán de la participación de sus GLR en todos los procesos relacionados con la aplicación, buscando su consulta, opinión y asesoramiento antes y después de aceptar una recomendación del EPU. La reflexión colectiva sobre estrategias concretas de aplicación sólo ayudará a los Estados en sus esfuerzos.

Italia ha dado un ejemplo encomiable al incluir a los gobiernos locales en su NMIRF, una medida de la que se hicieron eco otros Estados en el seminario. Miembro experto, Nicole Ameline del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer (CEDAW) también destacó el interés de su comisión por colaborar con los GLR.

En conclusión, el Centro de Ciudades de Ginebra está dispuesto a colaborar con los Estados, las ONG y el sistema de las Naciones Unidas para facilitar la inclusión de los GLR en los NMIRF. Como afirma el Centro de Ciudades de Ginebra, esto supondrá un triple beneficio: para los Estados, que obtendrán una visión más profunda de la aplicación de los derechos humanos; para los GLR, que reforzarán el diálogo con los Estados; y para la sociedad en su conjunto.

Crédito de la foto: UN Photo / Jean Marc Ferré

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